HANUKAH Yeshua la Luz del Mundo

Yeshua dijo: “Aní Jú la luz de esta edad presente, el que me sigue nunca más andará en tinieblas, sino que tendrá HaOr Hajayim”. Yohanan/Juan 8:12 Hanukah es la fiesta de las luminarias, recordando la purificación y la re dedicación del Templo en Yerushalayim, celebrando la gran victoria que HaShem le dio al pueblo mediante la lucha de los Macabeos contra greco-sirios. El rey greco-sirio Antíoco Epífanes invadió a Yerushalayim y saqueó el Templo en 168 a.c. Epífanes impulsó la cultura helénica, eliminando los sacrificios diarios en el Templo, profanó el Templo, hizo sacrificios de cerdos, persiguió a los judíos, prohibió la observancia del Shabat, las Santas Convocaciones, la circuncisión y que nuestro pueblo consumiera alimentos prohibidos por la Torah. El 25 de Kislev los Macabeos purificaron el Segundo Templo y quedó establecido la festividad de las luminarias, Hanukah. Hanukah significa dedicación y es una celebración de ocho días, según la historia, sólo había aceite para un día; pero hubo un milagro allá, que el aceite duró ocho días con la menorah encendida hasta que los sacerdotes produjeran nuevo aceite. La Hanukiah tiene ocho brazos o ramas y una en el centro que hace un total de nueve para encender las luminarias de aceite o velas. El aceite o la vela que va colocada en el centro se le llama shamash - la sierva o sirviente. Yeshua simbólicamente representa el shamash, pues nos recuerda que él es la Luz del mundo y vino para servirnos y así como el shamash ilumina a todas las demás velas, nosotros como sus talmidim somos iluminados para ser luz a todos los que nos rodean. Durante las ocho noches el shamash está en una posición separada para servir a las demás velas y éstas mantengan sus llamas encendidas y vivas. Precisamente a esto vino Yeshua, ser la Luz de esta edad presente para que tengamos la luz de la vida.

Nuestros sabios nos dan una enseñanza: “Debido a que el shamash se baja a sí misma para servir a las demás velas, termina con una posición exaltada sobre la hanukiah”. Yeshua asumió la posición de Shamash, se bajó a sí mismo entregando su neshamah por toda la humanidad, para el que anhele apasionadamente ser su talmid nunca más ande en tinieblas.

“Vosotros sois la luz de esta edad presente; una ciudad edificada sobre una montaña no puede esconderse”. Mattityahu/Mateo 5:14 “Porque ni siquiera el Ben HaAdam vino a ser servido, sino a servir y a dar su alma como kofer (rescate) para muchos.” Meir/Marcos 10:45. “Y la ciudad no tiene necesidad de luz procedente de energía solar ni energía de la luna, porque la gloria de D’ la iluminó, y el Cordero la mantiene como una lumbrera”. Apocalipsis 21:23. Tengamos todos una feliz fiesta de Hanukah y como ocurrió el milagro de la menorah encendida por ocho días, que ocurra nuestro milagro para cada uno.